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domingo, 5 de abril de 2015

Pascua de Resurrección

¡FELIZ PASCUA DE RESURRECCIÓN!



"No se puede vivir la Pascua sin entrar en el misterio. No es un hecho intelectual, no es sólo conocer, leer... Es más, es mucho más.

«Entrar en el misterio» significa capacidad de asombro, de contemplación; capacidad de escuchar el silencio y sentir el susurro de ese hilo de silencio sonoro en el que Dios nos habla (cf. 1 Re 19,12).

Entrar en el misterio nos exige no tener miedo de la realidad: no cerrarse en sí mismos, no huir ante lo que no entendemos, no cerrar los ojos frente a los problemas, no negarlos, no eliminar los interrogantes... Entrar en el misterio significa ir más allá de las cómodas certezas, más allá de la pereza y la indiferencia que nos frenan, y ponerse en busca de la verdad, la belleza y el amor, buscar un sentido no ya descontado, una respuesta no trivial a las cuestiones que ponen en crisis nuestra fe, nuestra fidelidad y nuestra razón.

Para entrar en el misterio se necesita humildad, la humildad de abajarse, de apearse del pedestal de nuestro yo, tan orgulloso, de nuestra presunción; la humildad para redimensionar la propia estima, reconociendo lo que realmente somos: criaturas con virtudes y defectos, pecadores necesitados de perdón. Para entrar en el misterio hace falta este abajamiento, que es impotencia, vaciándonos de las propias idolatrías... adoración. Sin adorar no se puede entrar en el misterio.


Todo esto nos enseñan las mujeres discípulas de Jesús. Velaron aquella noche, junto la Madre. Y ella, la Virgen Madre, las ayudó a no perder la fe y la esperanza. Así, no permanecieron prisioneras del miedo y del dolor, sino que salieron con las primeras luces del alba, llevando en las manos sus ungüentos y con el corazón ungido de amor. Salieron y encontraron la tumba abierta. Y entraron. Velaron, salieron y entraron en el misterio. Aprendamos de ellas a velar con Dios y con María, nuestra Madre, para entrar en el misterio que nos hace pasar de la muerte a la vida."

(SS Papa Francisco, Vigilia Pascual 2015)

viernes, 3 de abril de 2015

Viernes Santo



«Hoy avanza la cruz, la creación exulta; la cruz, camino de los descarriados, esperanza de los cristianos, predicación de los apóstoles, seguridad del universo, fundamento de la Iglesia, fuente para los sedientos... En una gran dulzura, Jesús es conducido a la pasión: es conducido al juicio de Pilato; a la hora sexta es flagelado; hasta la hora nona soporta los dolores de los clavos. Luego, la muerte pone fin a su Pasión. A la hora doce, es bajado de la cruz; parece un león dormido.»

«Durante el juicio, la sabiduría se calla y la Palabra no dice nada. Sus enemigos lo desprecian y lo crucifican... Aquellos, a quienes ayer, Él había dado su cuerpo como alimento, lo miran de lejos. Pedro, el primero de los apóstoles, huyó el primero. Andrés también se largó, y Juan, que descansaba sobre el pecho del Señor no impidió que un soldado le traspasara el costado con una lanza. Los doce han desaparecido; no han dicho ni palabra a favor de Jesús, ellos, por los que él dio su vida. Lázaro no está allí, él que fue rescatado de la muerte. El ciego no ha llorado a aquel que le abrió sus ojos a la luz, y el cojo que puede caminar gracias a él, no ha corrido tras Jesús.»


«Sólo un bandido, crucificado con él, lo confiesa y lo llama su rey. ¡Oh, ladrón, primicia de la cruz, primer fruto del árbol de Gólgota...! El Señor reina, la creación está llena de gozo. La cruz triunfa y todas las naciones, tribus, lenguas y pueblos (Ap 7,9) vienen a adorar...en una sola Iglesia, una sola fe, un solo bautismo en la caridad. La cruz se levanta en el centro del mundo, fijada sobre el calvario.»

Homilía atribuida a San Efrén, doctor de la Iglesia (siglo IV)

jueves, 2 de abril de 2015

Jueves Santo





1ra Carta de San Pablo a los Corintios (11,23-26)

«Hermanos: Lo que yo recibí del Señor, y a mi vez les he transmitido, es lo siguiente:
El Señor Jesús, la noche en que fue entregado, tomó el pan, dio gracias, lo partió y dijo: "Esto es mi Cuerpo, que se entrega por ustedes. Hagan esto en memoria mía".
De la misma manera, después de cenar, tomó la copa, diciendo: "Esta copa es la Nueva Alianza que se sella con mi Sangre. Siempre que la beban, háganlo en memora mía".

Y así, siempre que coman este pan y beban esta copa, proclamarán la muerte del Señor hasta que él vuelva.»

Oremos por nuestros sacerdotes, en el día de la institución del sacerdocio católico

domingo, 20 de abril de 2014

Pascua de Resurrección


Hoy es el primer día de otra creación. En este día Dios crea "un cielo nuevo y una tierra nueva" (Is 65,17; Ap 21,1)… En este día es creado el hombre verdadero, el que es "a imagen y semejanza de Dios" (Gn 1,26). Mira qué mundo se inaugura en este día, “este día que el Señor ha hecho " (Sal.  117,24)… Este día abolió el dolor de la muerte y dio a luz "al primogénito de entre los muertos" (Col 1,18). En este día… la prisión de la muerte ha sido destruida, los ciegos recobran la vista, "el sol que nace de lo alto, viene para socorrer a los que viven en tinieblas y sombras de muerte" (Lc 1,78s)…

viernes, 18 de abril de 2014

Viernes Santo


A cambio del árbol que provocó la muerte,
crecido en medio del Paraíso (Gn 3,3),
llevaste sobre los hombres el árbol de la cruz,
hasta el lugar llamado Gólgota.

jueves, 17 de abril de 2014

Jueves Santo





«Hermanos: Yo he recibido una tradición, que procede del Señor y que a mi vez os he transmitido: Que el Señor Jesús, en la noche en que iban a entregarlo, tomó pan y, pronunciando la acción de gracias, lo partió y dijo: "Esto es mi cuerpo, que se entrega por vosotros. Haced esto en memoria mía." Lo mismo hizo con él cáliz, después de cenar, diciendo: "Este cáliz es la nueva alianza sellada con mi sangre; haced esto cada vez que lo bebáis, en memoria mía." Por eso, cada vez que coméis de este pan y bebéis del cáliz, proclamáis la muerte del Señor, hasta que vuelva.»

Segunda Lectura de la Liturgia de Jueves Santo
(1ra Corintios 11,23-26)

domingo, 13 de abril de 2014

Domingo de Ramos


«Se rebajó a sí mismo; por eso Dios lo levantó sobre todo»

«Hermanos: Cristo, a pesar de su condición divina, no hizo alarde de su categoría de Dios; al contrario, se despojó de su rango, y tomó la condición de esclavo, pasando por uno de tantos. Y así, actuando como un hombre cualquiera, se rebajó hasta someterse incluso a la muerte, y una muerte de cruz.»

«Por eso Dios lo levantó sobre todo, y le concedió el "Nombre-sobre-todo-nombre"; de modo que al nombre de Jesús toda rodilla se dobla -en el cielo, en la tierra, en el abismo-, y toda lengua proclame: "¡Jesucristo es Señor!", para gloria de Dios Padre.»
Filipenses 2, 6-11
Segunda lectura del Domingo de Ramos

lunes, 1 de abril de 2013

Venezuela: del Culto a la Personalidad al Culto Religioso

Autora: Nieves San Martín para Zenit


El cardenal arzobispo de Caracas, Venezuela, Jorge Urosa Savino, fue claro durante la misa del pasado Miércoles Santo en honor al Nazareno de San Pablo, en la iglesia de Santa Teresa de Caracas. En siete oportunidades repitió que Dios se encarnó en hombre únicamente a través de Jesucristo y sólo él merece toda la gloria. Son palabras similares a las que ya había pronunciado durante la liturgia del Domingo de Ramos.

domingo, 31 de marzo de 2013

¡Felices Pascuas! Cristo Ha Resucitado

Autor: Lic. Orlando Carmona para CatholicNet



La Pascua celebra la resurrección de Jesucristo, victorioso sobre la muerte. Su victoria es nuestra victoria. Verdad fundamental de la fe cristiana. Un canto pascual a esta fiesta la llama "La reina de todas las estaciones," "día esplendoroso," "la fiesta regia de todas las fiestas". 

Éste es el día que hizo el Señor. La Iglesia se reúne felizmente cansada después de la intensidad de la Vigilia Pascual. El Padre nos recibe en casa, como al hijo pródigo, nos agasaja con un banquete y nos da una túnica nueva.

domingo, 24 de marzo de 2013

Domingo de Ramos

En aquel tiempo, Jesús iba hacia Jerusalén, marchando a la cabeza. Al acercarse a Betfagé y Betania, junto al monte llamado de los Olivos, mandó a 2 discípulos, diciéndoles: «Id a la aldea de enfrente; al entrar, encontraréis un borrico atado, que nadie ha montado todavía, Desatadlo y traedlo. Y si alguien os pregunta: “¿Por qué lo desatáis?”, contestadle: “El Señor lo necesita”».

Ellos fueron y lo encontraron como les había dicho. Mientras desataban el borrico, los dueños les preguntaron: «Por qué desatáis el borrico?». Ellos contestaron: «El Señor lo necesita».

Se lo llevaron a Jesús, lo aparejaron con sus mantos y le ayudaron a montar. Según iba avanzando, la gente alfombraba el camino con los mantos. Y, cuando se acercaba ya la bajada del monte de los Olivos, la masa de los discípulos, entusiasmados, se pusieron a alabar a Dios a gritos por todos los milagros que habían visto, diciendo: «Bendito el que viene como rey, en nombre del Señor! Paz en el cielo y gloria en lo alto». 

Algunos fariseos de entre la gente le dijeron: «Maestro, reprende a tus discípulos». El replicó: «Os digo que, si estos callan, gritarán las piedras».

    (Evangelio según san Lucas 19,28-40)