miércoles, 1 de diciembre de 2010

El Hombre Mediocre


“Al mediocre le agradan los escritores que no dicen ni sí ni no, sobre ningún tema, que nada afirman y que tratan con respeto todas las opiniones contradictorias.”

“Toda afirmación les parece insolente, pues excluye la proposición contraria. Pero si alguien es un poco amigo y un poco enemigo de todas las cosas, el mediocre lo considerará sabio y reservado, admirará su delicadeza de pensamiento y elogiará el talento de las transiciones y de los matices.”

“Para escapar a la censura de intolerante, hecha por el mediocre a todos los que piensan sólidamente, sería necesario refugiarse en la duda absoluta; y aún en tal caso, sería preciso no llamar a la duda por su nombre. Es necesario formularla en términos de opinión modesta, que reserva los derechos de la opinión opuesta, toma aires de decir alguna cosa y no dice nada. Es preciso añadir a cada frase una perífrasis azucarada: “parece que”, “osaría decir que”, “si es lícito expresarse así”.

“Al activista de la mediocridad le queda al actuar una preocupación: es el miedo a comprometerse. Así, expresa algunos pensamientos robados a Perogrullo (1), con la reserva, la timidez y la prudencia de un hombre receloso de que sus palabras, por demás osadas, estremezcan al mundo.”

“Al juzgar un libro, la primera palabra de un hombre mediocre se refiere siempre a un pormenor, habitualmente un pormenor de estilo. “Está bien escrito”, dice él, cuando el estilo es corriente, incoloro, tímido. “Está mal escrito”, afirma él, cuando la vida circula en una obra, cuando el autor va creando para sí un lenguaje a medida que habla, cuando expresa sus pensamientos con ese desembarazo osado que es la franqueza de un escritor.

“El mediocre detesta los libros que obligan a reflexionar. Le agradan los libros parecidos a todos los otros, los que se ajustan a sus hábitos, que no hacen romper su molde, que caben en su ambiente, que los conoce de memoria antes de haberlos leído, porque tales libros se parecen a todos los otros que él leyó desde que aprendió a leer.”

“El hombre mediocre dice que hay algo de bueno y de malo en todas las cosas, que es preciso no ser absoluto en su juicio, etc.”

“Si alguien afirma categóricamente la verdad, el mediocre lo acusará de exceso de confianza en sí mismo. El, que tiene tanto orgullo, no sabe qué es el orgullo. Es modesto y orgulloso, dócil frente a Marx y rebelde contra la Iglesia. Su lema es el grito de Joab: “Soy audaz solamente contra Dios”.

“Toda afirmación les parece insolente, pues excluye la proposición contraria.”

“El mediocre, en su temor de las cosas superiores, afirma amar ante todo el sentido común; sin embargo no sabe qué es el sentido común. Pues por esas palabras entiende la negación de todo cuanto es grande.”

“El hombre inteligente eleva su frente para admirar y para adorar; el mediocre eleva la frente para bromear; le parece ridículo todo lo que está encima de él, y el infinito le parece el vacío”.

(1) Monsieur de la Palisse en el original francés

Ernest Hello (1828-1885), hagiógrafo francés
Versión en español: Acción Familia

Bolivia: Natalidad y Paradojas

El gobierno boliviano de Evo Morales viene aprobando leyes provenientes del paquete ideológico del control natal y del aborto. Históricamente una nueva campaña antinatalista  no sería ninguna novedad en Bolivia. Pero esta vez, aunque sea difícil de imaginarlo, el gobierno viene adoptando las tesis del feminismo radical como una necesaria rebelión de los pueblos indígenas frente a la dominación cultural de Occidente que busca exterminarlos.

Se aprobó la Ley contra el Racismo y la no Discriminación que incluían los conceptos de “orientación sexual” y “género” que son parte de la estrategia internacional de organizaciones (muy occidentales) que exportan la anticoncepción y el aborto en países pobres. También está en espera de aprobación el Proyecto de Ley de Derechos Sexuales y Reproductivos donde se explicita la despenalización del aborto.

Iglesia, Preservativo y Medios de Comunicación

El Director de la Sala de Prensa de la Santa Sede, P. Federico Lombardi, explicó que el Papa Benedicto XVI no ha cambiado la visión católica sobre el uso del preservativo. Éste, reiteró, no resuelve el problema del sida: lo que debe hacerse es trabajar por erradicar la banalización de la sexualidad para humanizarla.

En el texto que responde a diversas tergiversaciones de los medios de comunicación que informaron erróneamente que el Papa habría "aceptado el condón" en el libro-entrevista "Luz del mundo", de Peter Seewald. El Padre Lombardi explica que el lo dicho por el Papa aparece en el capítulo 10 del citado libro, al responder algunas preguntas sobre la lucha contra el sida y el preservativo, a raíz de lo dicho en el viaje a África en 2009.

En aquella oportunidad Benedicto XVI expresó claramente, siendo también tergiversado por los medios, que el sida no se resuelve con el preservativo sino con la humanización de la sexualidad y una cercanía especial a quienes sufren.

La nota del P. Lombardi señala que en esta ocasión "el Papa reivindica claramente que él entonces (en el viaje a África) no había querido tomar una posición sobre el problema de los preservativos en general, sino que había querido afirmar con fuerza que el problema del sida no puede resolverse con la sola distribución de preservativos, porque es necesario hacer mucho más: prevenir, ayudar, aconsejar, estar cercano a las personas, ya sea para que no se enfermen o en el caso de que ya estén enfermas".

Seguidamente señala que "el Papa observa que también en el ámbito no eclesial se ha desarrollado una conciencia análoga, como aparece en la llama teoría ABC (abstinencia, fidelidad, condones) en la que los primeros dos elementos (abstinencia y fidelidad) son mucho más determinantes y fundamentales para la lucha contra el sida, mientras que el preservativo aparece en último lugar como escapatoria, cuando faltan las otras dos. Debe entonces quedar claro que el preservativo no es la solución al problema".

"El Papa extiende luego la mirada e insiste en el hecho de que concentrarse solo en el preservativo equivale a banalizar la sexualidad, que pierde su significado como expresión de amor entre personas y se convierte en una especie de ‘droga’. Luchar contra la banalización de la sexualidad es ‘parte del gran esfuerzo para que la sexualidad sea valorada positivamente y pueda ejercer su efecto positivo sobre el ser humano en su totalidad’", prosigue.

El sacerdote indica además que "a la luz de esta visión amplia y profunda de la sexualidad humana y de su problemática, el Papa reafirma que ‘naturalmente la Iglesia no considera los preservativos como la solución auténtica y moral’ del problema del sida".

Con esto, añade, "el Papa no reforma o cambia la enseñanza de la Iglesia, sino que la reafirma colocándose en la perspectiva del valor y la dignidad de la sexualidad humana como expresión de amor y responsabilidad".

Al mismo tiempo, continúa el vocero vaticano, "el Papa considera una situación excepcional en la que el ejercicio de la sexualidad representa un verdadero riesgo para la vida del otro. En ese caso, el Papa no justifica moralmente el ejercicio desordenado de la sexualidad, sino que considera que el uso del preservativo para disminuir el peligro de contagio es ‘un primer acto de responsabilidad’, ‘un primer paso hacia el camino de una sexualidad más humana’, tomando en cuenta que no usarlo expone al otro a arriesgar la vida".

"Así, el razonamiento del Papa no puede definirse como un cambio revolucionario" precisa.

Muchos teólogos morales y destacadas personalidades eclesiásticas, dice luego el P. Lombardi, "han sostenido y sostienen posiciones análogas. Es cierto sin embargo que no las habíamos escuchado con tanta claridad de la boca de un Papa, aunque dichas en forma coloquial y no magisterial".

Finalmente la nota señala que el Papa Benedicto XVI "nos da entonces con coraje una contribución importante de clarificación y profundización sobre un asunto largamente debatido. Es una contribución original, porque por una parte tiene fidelidad a los principios morales y demuestra lucidez en el rechazo a un camino ilusorio como la ‘confianza en el preservativo’. De otro lado, sin embargo, manifiesta una visión integral y con visión de futuro, atenta a descubrir pequeños pasos –aún solo iniciales y todavía confusos– de una humanidad espiritual y culturalmente, y con frecuencia, pobrísima, hacia un ejercicio más humano y responsable de la sexualidad".

Premio Nobel de Teología

De acuerdo con lo publicado por la agencia Zenit, la creación del "premio Nobel de teología", con el nombre "Premio Ratzinger", es el objetivo de la fundación vaticana Joseph Ratzinger-Benedicto XVI, dijo este viernes el presidente su comité científico, el cardenal Camillo Ruini, antiguo obispo vicario de la diócesis de Roma. 

Este organismo fue presentado en una rueda de prensa en la Santa Sede, en la que participaron, además del purpurado, monseñor Giuseppe Antonio Scotti, presidente de la fundación, y el padre Stephan Otto Horn, S.D.S, presidente de una fundación análoga, que opera de manera autónoma desde 2004 en Munich.

La Fundación Vaticana Joseph Ratzinger, cuyas oficinas se encuentran en la vía de la Conciliación número 5, junto al recién creado Consejo Pontificio para la Nueva Evangelización, tiene el objetivo de promover la investigación y el estudio del pensamiento del profesor Joseph Ratzinger, así como organizar congresos de valor científico, y premiar estudiosos destacados por su investigación teológica.

El comité lo conforman, además del cardenal Ruini, el secretario de estado vaticano, cardenal Tarcisio Bertone, el prefecto de la Congregación para la Causa e los Santos, cardenal Angelo Amato, monseñor Jean-Louis Bruguès, secretario de la Congregación para la Educación católica, y monseñor Luis Francisco Ladaria, secretario de la Congregación para la Doctrina de la fe.

Para monseñor Scotti presidente de la fundación, es necesario que los expertos de teología tengan "la humildad de escuchar las respuestas que nos da la fe cristiana", así como "la humildad de percibir en estas respuestas su razonabilidad y hacerlos de alguna manera, nuevamente accesibles a nuestro tiempo y a nosotros mismos".

"Así no sólo se constituye la universidad sino también se ayuda a la humanidad a vivir", aseguró el prelado.

Por su parte el cardenal Ruini aseguró que la fundación no pretende ser "un órgano de gobierno", sino más bien "de dirección": "orientar las actividades de la fundación hacia niveles absolutos de excelencia".

Este nuevo organismo trabajará en estrecha colaboración con la "Joseph Ratzinger Papst Benedikt XVI. - Stiftung", creada en 2004 en Alemania, la cual busca organizar iniciativas de valor cultural y científico. Otras instituciones que se han visto interesadas en colaborar con esta nueva iniciativa son el instituto Benedicto XVI de Ratisbona, cuyo fin es hacer una edición integral de los escritos de Ratzinger, y la fundación Heimathaus de Marktl.

La Vida después de la Vida

Con este título muchos autores a lo largo de los años han tratado de escribir sobre lo que pasa después de que termina nuestra existencia terrenal; entre las más destacadas está la famosa Dra. Elizabeth Kübler-Ross, cuya obra de alguna manera impulsa e inaugura todas las reflexiones sobre las llamadas Experiencias Cercanas a la Muerte o Near Death Experience como se les conoce en inglés idioma en que ha sido muy prolífica esta literatura y que centralmente sostiene que inmediatamente después de expirar la persona entra en un estado de paz profunda y comienza un viaje a través de un túnel al final del cual brilla una luz inmensa que atrae al ser y a su particular circunstancia.

Nosotros sabemos además por nuestra Fe, que después de nuestra llegada a la otra vida, habrá de iniciarse nuestro juicio particular y que dependiendo de nuestras obras, acciones y pensamiento así como de haber reconocido en Jesús al Hijo Único de Dios y a nuestro Salvador, habremos de alcanzar por la gracia y misericordia de Dios, la Vida Eterna en la Casa del Padre, no sin antes en la gran mayoría de los casos, pasar por el proceso de purificación total que toda alma que entre en el Cielo, debe cumplir en el real y existente Purgatorio.

En este mes de Noviembre en que la Iglesia y nosotros los fieles conmemoramos a los llamados Files Difuntos, en realidad se nos da la oportunidad especialísima de contribuir muy importantemente a la salvación de las  Almas del Purgatorio, dándole con ello a nuestro Salvador Jesucristo una de las mayores alegrías que él espera de nosotros como continuadores de su obra salvífica, pues irónicamente por esos misterios de la Justicia Divina y Perfecta, Jesús ansiando tener ya a su lado esas almas por las que tan alto precio pagó, no puede o quizá ya no debe hacer más para eliminar, apurar o acortar el proceso purificatorio de esas almas, pues por su parte ya hizo lo más grande y trascendente que fue ganarles el derecho a la salvación y a la vida eterna. Tampoco esas almas benditas, pueden ayudarse en nada para acortar sus penas y sufrimientos, entre ellos el más doloroso que es saberse separadas de la amistad y contacto con Dios después de haberlo visto a la cara y haber conocido y comprendido la grandeza de su Amor; solamente nosotros los que aún vivimos, los que nos encontramos en esta Iglesia Militante aquí en la Tierra tenemos el don de acortar, reducir, suavizar e impulsar a esas Almas a su felicidad plena y a la continuación de su evolución espiritual dentro de la Casa de Nuestro Padre Eterno, donde ya el enemigo no existe y con él tampoco la enfermedad, la decadencia, la tristeza y la muerte.

Por eso este mes de Noviembre, previo a la grande y enorme fiesta de la Navidad con la que se cierra cada año de nuestra vida en esta Tierra, tenemos la gran oportunidad de prepararnos a recibir de nuevo a nuestro Salvador, orando y ofreciendo toda clase de sufragios a nuestro alcance, como son la Misas, la Confesión, la Eucaristía y el Rosario entre otros, precisamente por la salvación de las Ánimas del Purgatorio y tendremos la certeza de que nada hará más feliz a Jesús a nuestra madre la Virgen María y a San José, que ver ingresar al Paraíso a un mayor número de hijos del Eterno, que fueron la razón y la causa eficiente precisamente de que existiera la Navidad.

Adicionalmente a este gran regocijo de la Sagrada Familia y de la Santísima Trinidad misma, ya podemos imaginar la gratitud de muchos hermanos y hermanas nuestros, muchos de los cuales inclusive son nuestros parientes, por haber podido alcanzar la Gloria y acortar la separación y el sufrimiento, ¡cuánto intercederán por nosotros y cuánto velarán por nuestro último momento para acompañarnos al encuentro de nuestro Salvador y de nuestro Padre y Creador!; podemos estar seguros, después de tener amigos así en la Eternidad, nunca jamás volveremos a estar solos, ni aquí ni allá.
 
Lleguemos pues al pesebre decembrino, al lado del niño del tambor, con nuestras manos llenas de muchos nombres de niños, de hombres y mujeres para quienes fuimos esa escalera que los llevó al Cielo y con el corazón lleno de mucha esperanza de que con el nuevo nacimiento de Cristo, este oficio de ser seres humanos, seguirá valiendo la pena.
 
Eduardo Sastre de la Riva
Gólgota OnLine