domingo, 1 de junio de 2008

Un Dinosaurio Momificado


De acuerdo con la noticia publicada por la agencia Associated Press en marzo de 2008, el cuerpo completado y momificado de un dinosaurio está siendo desenterrado con extrema precisión desde 2004 en los Estados Unidos.

Se trata probablemente de los restos de un edmontosaurio, en realidad identificado ya en 1999, según lo que describe uno de los paleontólogos a cargo, Phillip Manning.

En función del relato de los investigadores, no se trataría del primer caso de estas características. No obstante, no dejan de sorprenderse debido al notable estado de conservación de la pieza, aún semienterrada en la antigua roca de una región desértica de Dakota del Norte. En función del uso de tecnología portátil con rayos X, se estima que la longitud del ejemplar completo es de alrededor de nueve metros.

«Puede tratarse quizás de la mejor de las momias, ya que la calidad y la extensión de la piel que encontramos supera a la de otros casos», acotó Stephen Begin, otro miembro del proyecto.

Como hemos mencionado en otros ensayos, el proceso de momificación implica la preservación natural de los tejidos, por acción de un medio ambiente que le permite a un mismo tiempo perder humedad, siempre y cuando los organismos carroñeros no lo consuman antes. Según los científicos a cargo de este fascinante proyecto, el dinosaurio (al que llamaron Dakota), debió haber muerto en forma abrupta y, simultáneamente, ser sepultado por la roca; de esta manera, «el proceso de putrefacción fue evitado por la fosilización, preservándose la mayor parte de los tejidos blandos», en palabras de Manning. «No se trata de la frase interrumpida o de los fragmentos de una palabra que el registro fósil nos brinda en general de las formas de vida antigua. Esto es un capítulo completo.»


La roca que atrapó a Dakota al momento de su muerte, según los métodos de datación radiométrica, tendría unos 65 millones de años de edad. Además de la imposibilidad de ser objetivos con este método, nos topamos con la consistente realidad del hallazgo de una momia con conservación de tejidos blandos, al igual que ha ocurrido con un T.rex con anterioridad.
¿Cabe acaso plantearse que nuestros conceptos sobre el proceso de momificación son erróneos? O, por el contrario, ¿estamos en un error al considerar la antigüedad de seres que, llamativamente, se encuentran tan bien preservados como nuestras recientes y milenarias momias incaicas?
Publicado en formato 1.0 en junio de 2008