martes, 28 de enero de 2014

Santo Tomás de Aquino en 13 Pensamientos


El pecado ofende a Dios lo que perjudica al hombre.

Creer es un acto del entendimiento que asiente a la verdad divina por imperio de la voluntad movida por Dios mediante la gracia.  

La justicia es la firme y constante voluntad de dar a cada uno lo suyo. 


A todo movimiento de la voluntad es necesario que le preceda un conocimiento. Pero no a la inversa: no a todo conocimiento precede una noción voluntaria.  

El bien puede existir sin el mal, mientras que el mal no puede existir sin el bien.

Teme al hombre de un solo libro. 

La fe se refiere a cosas que no se ven, y la esperanza, a cosas que no están al alcance de la mano.

Justicia sin misericordia es crueldad.




Los seres dotados de inteligencia desean existir siempre y un deseo natural no puede existir en vano.

La ley es la prescripción de la razón, ordenada al bien común, dada por aquel que tiene a su cargo el cuidado de la comunidad.

La verdad de nuestra fe se vuelve objeto de ridículo entre los infieles si cualquier católico, no dotado con el aprendizaje científico necesario, presenta como dogma lo que el escrutinio científico demuestra falso.

Si el objetivo más alto de un capitán fuera preservar su barco, lo mantendría en el puerto por siempre.

Es evidente que existe la verdad. Porque el que niega que existe la verdad, conoce que la verdad existe. Si, pues, no existe la verdad, es verdad que la verdad no existe.