1) Para saber
El padre Gabriele Amorth, de 86 años de edad, es un sacerdote exorcista de la diócesis de Roma, y uno de los más conocidos del mundo. Lleva muchos miles de exorcismos en su haber. Hace poco le hicieron una entrevista donde revela interesantes verdades. Lo primero que dijo es que “el mundo tiene que saber que Satanás existe”.
En su pequeña y sencilla oficina, en Roma, en donde ha llevado muchos exorcismos, el sacerdote contó que a veces invoca la ayuda de santos, entre los que destaca Juan Pablo II, beatificado por el Papa Benedicto XVI ante un millón y medio de fieles. Señaló que el ahora Beato Papa Juan Pablo II se ha convertido en un poderoso intercesor en la lucha contra el demonio.
Durante los exorcismos le ha preguntado al demonio más de una vez: ‘¿Por qué te da tanto miedo Juan Pablo II?’ Y ha tenido dos respuestas distintas, ambas interesantes".
La primera razón es debido a que desarmó sus planes. El padre Amorth cree que con eso se refiere a la caída del comunismo en Rusia y en Europa del Este; al colapso del comunismo.
Otra respuesta que el demonio le dio fue: “porque arrebató a muchos jóvenes de mis manos. Hay muchos jóvenes que, gracias a Juan Pablo II, se convirtieron. Tal vez algunos ya eran cristianos pero no practicantes, y luego con Juan Pablo II volvieron a la práctica".
¿A quién acudir como intercesor más efectivo? Con tanta experiencia el padre Amorth, no solo respondió, sino que él mismo preguntó al demonio por qué temía tanto su intercesión. Veamos.
2) Para pensar
Al ser preguntado sobre el intercesor más efectivo de todos, el P. Amorth contestó sin dudar: "Por supuesto que la Virgen es la más efectiva cuando la invocas como María. Una vez ‑dijo el padre‑ le pregunté a Satanás: ¿Por qué te asustas más cuando invoco a Nuestra Señora que cuando invoco a Jesucristo?
El demonio contestó: “Porque me humilla más ser derrotado por un criatura humana que ser derrotado por Él”.
El padre Amorth manifestó su preocupación por la cantidad de jóvenes que son afectados por Satanás a través de las sectas, las sesiones de espiritismo y las drogas. Pese a ello no se desalienta. Dijo, además, que en la lucha contra el demonio es necesaria especialmente la fe, se necesita mucha fe, una fe fuerte y absoluta.
3) Para vivir
Lo más común es que la acción del demonio consista en ponerle tentaciones al hombre para distanciarlo de Dios, que peque y llevarlo al infierno. Esta acción se realiza contra todos los hombres y las mujeres de todo lugar y religión. Hay otras acciones demoníacas, menos frecuentes, que son las extraordinarias como las posesiones.
Finalmente en la entrevista el padre Amorth propuso una breve guía a tomar en cuenta en la lucha contra Satanás:
"Las tentaciones del demonio son vencidas primero que nada evitando las ocasiones, porque el demonio siempre busca nuestros puntos más débiles. Y luego, con la oración. Nosotros los cristianos tenemos una ventaja porque tenemos la Palabra de Dios, tenemos la oración y podemos rezarle al Señor".
Además, no hay que temer, pues al acudir a Jesucristo y a la Virgen María, tenemos la victoria asegurada. Dios nos ha prometido que nunca permitirá tentaciones más grandes que nuestras fuerzas.
Padre José Martínez Colin
