jueves, 1 de agosto de 2013

Análisis de Cuatro Discursos Emblemáticos de Benedicto XVI

Fuente: AICA
Exposición Completa: Documentos AICA

El arzobispo de La Plata, monseñor Héctor Aguer, miembro de número de la Academia Nacional de Ciencias Morales y Políticas, ubicada en Buenos Aires, expuso en la sede de esa institución sobre cuatro discursos emblemáticos de Benedicto XVI.
El prelado platense se refirió a los mensajes que el pontífice emérito pronunció, entre 2006 y 2011, en la Universidad de Ratisbona, otro que preparó para decir en la Universidad "La Sapienza" de Roma, pero que finalmente no se realizó, y las exposiciones ante los parlamentos de Inglaterra y Alemania.


Aseguró que estas reflexiones se destacaron por “su altísimo valor intelectual y por la repercusión que tuvieron en distintos ámbitos extraeclesiales.

Monseñor Aguer sostuvo que “el enfoque de los temas abordados en los cuatro discursos parece de carácter exclusivamente europeo; además resulta notoria la preocupación por el presente y el destino de Europa. Pero en realidad las cuestiones que en ellos se plantean son cuestiones que se refieren al hombre en cuanto tal, a la idea del hombre, a la dimensión ética y religiosa de la existencia y de la organización social”.

“El Papa Ratzinger ha operado una especie de relanzamiento de la razón. Así lo estimaba, en un reciente comentario Armando Torno en el Corriere della Sera, quien observaba además que si la razón y la naturaleza son la base de una convivencia al margen de cualquier revelación sobrenatural, éste es el terreno sobre el cual católicos y laicos pueden encontrarse sin temor a recíprocas censuras o injerencias”, advirtió.

“El término laico se asume en este juicio en el sentido que tiene precisamente en Italia, y quizá también en Francia o en Estados Unidos, donde puede hablarse de laicidad positiva, es decir, de una relación entre Iglesia y Estado que se desarrolla merced al respeto que se otorga a la religión y a su papel en la esfera pública”, agregó.

Monseñor Aguer dijo que “en el mismo orden de cosas, el presidente de Italia Giorgio Napolitano comenta con reconocimiento el diálogo que ha mantenido con Benedicto XVI, identificándose ambos con los fundamentos de una política iluminada por la historia y regida por la razón. Lo hace en el prefacio que firma para el volumen titulado La ley del rey Salomón con los discursos del Papa en Ratisbona, New York, París, Londres y Berlín”.

“Valora allí el presidente la no exclusión del factor religioso de la esfera pública, la convicción, al contrario, de que deba reconocerse laicamente la dimensión social y pública del hecho religioso. Lo cual implica la apertura de un espacio común en el que puedan exhibirse en diálogo las respectivas razones de creyentes y no creyentes para intentar una respuesta a las grandes cuestiones de nuestro tiempo”, concluyó.